Actuar con otros

Explorar la incidencia conjunta para el reconocimiento y apoyo apropiados

Lecciones aprendidas en la incidencia

El enfoque de la incidencia dependerá del contexto, la visión y las necesidades de las personas involucradas. Vea estos documentos de referencia para obtener más información sobre:

Explorar el reconocimiento social en la práctica

El reconocimiento social puede entenderse como la atención, el reconocimiento y el elogio públicos apropiados. Puede adoptar la forma de menciones e inscripciones oficiales, honores y premios, y la exposición mediática para conseguir la visibilidad deseada. El reconocimiento social puede proporcionar a una comunidad diversas plataformas para dar a conocer públicamente las iniciativas de sus territorios de vida, si lo desean, y hacer que sean más respetadas.  No obstante, el reconocimiento social también puede ser perjudicial como cuando genera una exposición no deseada o cuando crea o exacerba tensiones. Por ejemplo, esto puede suceder cuando algunas comunidades, o ciertas personas dentro de una comunidad, son destacadas por encima de otras. [1]

Algunas formas eficaces para reconocer a los territorios de vida en la práctica [2] incluyen:

  • Garantizar que la policía y el sistema judicial respalden y no contradigan a las comunidades en sus operaciones de vigilancia y aplicación de la ley y a la hora de juzgar y sancionar a los infractores de forma coherente y justa;
  • Establecer, acatar y difundir información sobre los acuerdos y mecanismos locales que reconocen territorios de vida específicos y sus comunidades guardianas, asegurándose de que los planes locales de uso y los planes de desarrollo integren y prevean los territorios de vida y no los contradigan a ellos ni a sus normas.

Explorar el reconocimiento y el apoyo en virtud del derecho y las políticas internacionales

El reconocimiento de los TICCA en la legislación internacinoal sobre biodiversidad y en las políticas de conservación, especialmente por parte de la UICN y según el CDB, no ha parado de crecer desde el cambio de milenio (ver Parte I).  Si bien una revisión de los elementos específicos del derecho y las políticas internacionales que sustentan a los TICCA va más allá del alcance de estas directrices, es recomendable que cualquier comunidad guardiana tome conciencia del papel cada vez más importante de los TICCA en el ámbito internacional y del hecho de que son reconocidos como una fuente de beneficios mundiales para, entre otros, la conservación de la diversidad biocultural, el mantenimiento de medios de vida sostenibles y del clima, y la satisfacción de los derechos humanos colectivos y de los Pueblos Indígenas. Dicha toma de conciencia y estos conocimientos específicos pueden fortalecer los argumentos de los guardianes y su incidencia en las formas de reconcimiento y apoyo que desean y merecen.

Los derechos a la autodeterminación de los Pueblos Indígenas y las comunidades locales, reconocidos en virtud del derecho y las políticas internacionales, son una pieza fundamental en el reconocimiento y el apoyo a los TICCA [3]. Es posible incidir directamente por los derechos territoriales colectivos, por ejemplo, al hacer hincapié en el respeto de las conexiones importantes entre los derechos humanos y el medioambiente [4], y en el respeto de los derechos de los Pueblos Indígenas [5]. Estos puntos de entrada pueden ser más sólidos y fiables en los próximos años si se desarrollan y utilizan eficazmente los estándares y los mecanismos de responsabilización en materia de derechos humanos y derechos de los Pueblos Indígenas.

Estratégicamente, también parece ser eficaz abogar por los derechos territoriales colectivos locales basándose en los beneficios locales, nacionales y mundiales que generan para la conservación. Hasta el momento, el reconocimiento internacional de los TICCA se ha logrado mediante esa vía, argumentando que una mayor diversidad en la gobernanza de la conservación es beneficiosa tanto para las personas como para la naturaleza. Una incidencia que empiece con tales argumentos [6] puede tener más probabilidades de éxito a corto plazo. Es muy posible que sea la opción elegida en situaciones de escasa tracción política para los derechos humanos y de los Pueblos Indígenas o de amenazas inminentes. Sin embargo, también es cierto que la incidencia basada únicamente en los beneficios de la conservación coloca a los derechos de tenencia y otros derechos en una posición precaria y puede obligar a las comunidades a «entregar» resultados de conservación que están fuera de su control o no se ajustan a sus visiones.

Para encontrar puntos de entrada en los foros internacionales que puedan apoyar o impulsar el reconocimiento apropiado de los TICCA, puede ser útil ponerse en contacto con las organizaciones de la sociedad civil (OSC) pertinentes del país. ¿Existen OSC que ya hayan participado en los foros y convenciones internacionales pertinentes? ¿Podrían brindar asesoramiento y conexiones con las agencias de la ONU o con funcionarios gubernamentales pertinentes, como los designados por el gobierno como puntos focales para las convenciones internacionales tales como el CDB o los que se ocupan de los derechos humanos y de las políticas alimentarias progresistas [7]?  Las oficinas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) a cargo de implementar los Programas de Pequeñas Donaciones del Fondo Mundial para el Medio Ambiente (PPD FMAM) y del apoyo a los proyectos de la Iniciativa Mundial de Apoyo a los TICCA (GSI) en particular son otros buenos ejemplos de entidades y personas con a las que contactar, incluso para obtener información sobre formas de reconocimiento social para iniciativas comunitarias ejemplares, tales como el Premio Ecuatorial. Por último, pero no menos importante, las comunidades guardianas pueden querer contactar al Consorcio TICCA cuyos Miembros, Miembros Honorarios y personal semivoluntario están presentes actualmente en más de 70 países. Para establecer estas conexiones, el Equipo Local puede considerar útil tener el apoyo del facilitador, quien puede estar bien informado sobre la situación del país en materia de políticas y oportunidades internacionales y tener contacto personal con los funcionarios pertinentes.

El objetivo no es que cada comunidad guardiana de los territorios de vida participe activamente en las convenciones internacionales. Más bien, todas las comunidades interesadas pueden y deberían ser plenamente conscientes de que los acuerdos medioambientales internacionales han destacado los diversos valores locales y mundiales de los territorios de vida, y de que su reconocimiento formal y apoyo por parte de los gobiernos nacionales están alineados respetando debidamente el derecho y las políticas internacionales a los que dichos gobiernos se han adherido.

Explorar el reconocimiento y el apoyo en virtud del derecho y las políticas nacionales

Diversas formas de reconocimiento legal y en las políticas de los TICCA son posibles a nivel nacional (ver el recuadro sobre Instrumentos legales y políticas nacionales que reconocen los TICCA en la Parte I de este documento). Muchos gobiernos ofrecen reconocimiento legal a las tierras o territorios comunitarios bajo título comunal y algunos más específicamente a los TICCA. Por ejemplo, países como Colombia, Filipinas, India, Ecuador y Brasil reconocen legalmente los derechos colectivos sobre la tierra de sus Pueblos Indígenas o tribales y los correspondientes derechos de uso sobre su biodiversidad cultural. Asimismo, países como Australia, México, Italia, Fiji y Senegal tienen formas específicas para reconocer a las comunidades como órganos de gobierno de áreas con valor de conservación que en ocasiones están incluidas en sus sistemas oficiales de áreas protegidas. Los mecanismos y prácticas relacionados están respaldados por una legislación o políticas específicas. [8]

En la actualidad, diversos países también están debatiendo formas para reconocer los territorios comunitarios más específicamente como TICCA para destacar y preservar su valor de conservación. Esto es muy importante incluso cuando las comunidades poseen derechos colectivos sobre la tierra, ya que el reconocimiento de los TICCA aumenta la seguridad de la tenencia y los derechos de uso de las comunidades pertinentes. Reconocer a los TICCA por su valor de conservación puede fortalecer las demandas de consentimiento libre, previo e informado (CLPI) de las comunidades guardianas y la eventual oposición a las concesiones extractivas clandestinas que podrían ser asignadas por los gobiernos independientemente de los derechos sobre la tierra. [9]

Una primera medida en la búsqueda de reconocimiento legal nacional de los TICCA como tales es comprender las opciones disponibles en la legislación y política de aquel país. Esto permite que las comunidades evalúen los pros y contras de las diferentes opciones y su idoneidad teniendo en cuenta su contexto y preocupaciones específicas. Para el Consorcio TICCA, un punto importante de partida para esta investigación es una revisión nacional legal y de políticas de los TICCA [10], que es preferible que se realice a nivel nacional y que la encarguen muchas comunidades, ya que sería relevante para todas ellas. En este caso, nuevamente la colaboración entre el Equipo Local y el facilitador es importante, ya que este último puede acceder a fondos para encomendar dicha revisión nacional y asegurarse de que los resultados sean comunicados a todas las comunidades involucradas. 

Instrumentos legales y de políticas nacionales que reconocen los territorios de vida

(adaptado de Borrini-Feyerabend et al. 2010)

Idealmente, los territorios de vida se reconocen como unidades coherentes de tierra, agua y recursos naturales gobernadas por comunidades autodefinidas bajo un título común (propiedad o derecho a gobernar y usar) que es inalienable, indivisible y establecido a perpetuidad. En la práctica, existen diversos instrumentos y marcos jurídicos en los diferentes países que se ajustan más o menos bien a estos ideales. Algunos ejemplos son:

Una legislación que aborde la tenencia colectiva jurídica o consuetudinaria, la gobernanza y los derechos de los Pueblos Indígenas o comunidades locales sobre sus territorios y tierras ancestrales, aguas y recursos naturales. En algunos casos, este tipo de legislación solo se aplica a comunidades específicas, como comunidades de montañas, pueblos tribales que viven en ambientes forestales, comunidades costeras que gestionan zonas de pesca consuetudinarias o comunidades de descendientes de esclavos (Quilombolas, comunidades afrocolombianas, etc.). En otros casos, se aplica a todos los «Pueblos Indígenas» de un país que pueda cumplir ciertos requerimientos de dominios ancestrales y se puede referir a esfuerzos colectivos específicos (por ejemplo, la trashumancia). El reconocimiento en la legislación puede ser totalmente independiente de los resultados de conservación, aunque puede ser fortalecido si se une con el reconocimiento de los resultados de conservación derivados del ejercicio de la tenencia, la gobernanza y los derechos consuetudinarios.

Leyes de áreas protegidas que abarquen el espectro completo de los tipos de gobernanza de estas áreas que incluye la gobernanza por parte de los Pueblos Indígenas y las comunidades locales, dentro y fuera de un sistema nacional de las áreas protegidas [11]. De esta forma, las comunidades con una capacidad demostrada para conservar territorios y áreas de valor nacional para la biodiversidad disponen de un grado importante de autodeterminación, ya que siguen aportando beneficios a la sociedad en general. Los marcos de áreas protegidas pueden proporcionar tanto un respaldo legal como un apoyo financiero para que las comunidades se gobiernen a sí mismas mientras se defienden de las amenazas de las concesiones para actividades extractivas y las megainfraestructuras. Las decisiones recientes del CDB han enfatizado la necesidad de reconocer adecuadamente a los TICCA también cuando se superponen con las áreas protegidas gubernamentales oficiales mediante una positiva colaboración entre las autoridades de aquellas áreas pertinentes y las comunidades. [12]

Políticas sectoriales en silvicultura y vida silvestre, agricultura, turismo, minería, pesca, finanzas y desarrollo económico que reconozcan a los Pueblos Indígenas y a las comunidades locales como sujetos legales con responsabilidades y derechos colectivos. Usualmente, regulan tipos especiales de concesiones y privilegios comunitarios como para la pesca, la caza, la recolección y el uso sostenible de los bosques.

Políticas de tenencia de la tierra y descentralización que reconozcan a los Pueblos Indígenas y a las comunidades locales como sujetos legales con responsabilidades y derechos colectivos y medidas eficaces de conservación de áreas ecológicamente importantes o sensibles, tales como cuencas hidrográficas, ríos, lagos, humedales y zonas costeras. Como parte de este reconocimiento, la toma de decisiones es traída al nivel comunitario mediante diversas formas de negociación y los gobiernos locales, subnacionales y nacionales acuerdan declarar territorios de vida «fuera de los límites» de las actividades destructivas. Si bien la propiedad privada colectiva (que incluye el acceso, uso y disposición) ofrece el conjunto de derechos más poderoso, incluso los derechos garantizados de uso de la tierra o el agua bajo una variedad de regímenes de propiedad (privado, estatal o municipal) pueden sustentar eficazmente un territorio de vida a partir de estatutos locales y ordenanzas municipales. Lo importante es que los acuerdos consigan desarrollar una asociación consolidada y duradera entre los territorios de vida y sus comunidades guardianas y que se les permita a estas comunidades desarrollar y aplicar las normas pertinentes.

Explorar la incidencia conjunta para un reconocimiento y apoyo apropiados

Un reconocimiento y apoyo apropiados a sus territorios de vida puede ayudar a las comunidades a garantizar y ejercer sus responsabilidades y derechos colectivos. Sin embargo, un reconocimiento y apoyo inapropiados generalmente son perjudiciales y provocan una influencia e impacto no deseados en la comunidad y el territorio de vida [13]. Como parte del proceso de autofortalecimiento, la red nacional TICCA, debe considerar cuidadosamente qué tipos de reconocimiento y apoyo legales, de políticas y sociales son apropiados en su contexto compartido (ver Preguntas de discusión 7.2). Es muy importante que las comunidades guardianas de los TICCA aboguen por una forma específica de reconocimiento y apoyo solo después de haber realizado una investigación bien informada y transparente sobre los beneficios y riesgos de las diversas opciones y bajo la autoridad y responsabilidad de sus representantes legítimos.

Diferentes comunidades guardianas que estén de acuerdo en lo que necesitan pueden incidir en conjunto, como redes TICCA, por la aprobación o aplicación de leyes y políticas apropiadas para ellas, además de que pueden necesitar socios. Los movimientos nacionales por los derechos de la tierra, de los campesinos y de los Pueblos Indígenas pueden ser socios poderosos para las comunidades guardianas de los TICCA, como también las organizaciones y movimientos de la sociedad civil por la conservación de la naturaleza, los medios de vida sostenibles y derechos humanos en materia del medioambiente. Al momento de optar si participar o no con los partidos políticos, y de qué forma, será una decisión tomada por cada red TICCA con mucho criterio. 

El facilitador puede resaltar que la incidencia exitosa suele tener un objetivo claro y bien argumentado (por ejemplo, una modificación específica de una política o la financiación de un plan específico) y está respaldada por ejemplos concretos y positivos, un presupuesto específico y una circunscripción lo más unificada y diversa posible. También es importante que el facilitador establezca relaciones con una o varias personas u organizaciones con conocimientos legales. Lo ideal sería que cualquier incidencia específica fuera apoyada por al menos una organización de la sociedad civil con conocimientos legales y competente para ofrecer estrategias y soluciones legales, presentar solicitudes, hacer un seguimiento de casos específicos, ayudar en temas y conflictos relacionados con la tierra y los recursos, respaldar el reconocimiento de territorios de vida específicos, ofrecer protección para los derechos colectivos cuando sean cuestionados, capacitarse en conocimientos de asistencia jurídica, etc.

Explorar el registro de los TICCA a nivel internacional y nacional

En la actualidad, las comunidades guardianas pueden «registrar» sus TICCA si quieren visibilizar su existencia en el ámbito internacional. Durante los últimos años, el Centro Mundial para el Seguimiento de la Conservación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP-WCMC, por su sigla en inglés) ha ofrecido a las comunidades la opción de documentar sus territorios directamente en la Base de Datos Mundial sobre Áreas Protegidas (WDPA, por su sigla en inglés) si aquel territorio de vida cumple con la definición de área protegida de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) [1] o en un Registro TICCA internacional específico que ellos gestionan.

Note icon

Este Módulo solamente incluye información introductoria del Registro TICCA gestionado por el UNEP-WCMC. Los detalles y enlaces para completar los formularios de registro se encuentran en línea y en un Manual disponible en varios idiomas:

www.wcmc.io/iccadatamanual

www.wcmc.io/iccadatamanual_FR

www.wcmc.io/iccadatamanual_ESP

La WDPA es una base de datos que reúne todos los tipos de áreas protegidas según la definición de la UICN e incluye a los TICCA como ejemplo de uno de los cuatro tipos principales de gobernanza. Por otro lado, el Registro TICCA es una base de datos solamente de los TICCA que cuenta con varias características distintivas: almacena la información en un formato similar al de la WDPA, pero puede incluir más detalles; existe la opción de que las comunidades guardianas que proporcionan la información puedan mantenerla en la base de datos, pero que no esté disponible para el público si así se decide; y, por último, la comunidad tiene una opción adicional de presentar un estudio de caso del territorio de vida, o una breve descripción narrativa, el cual es de acceso público en internet y no requiere de un registro previo.

Para registrar un territorio de vida, la comunidad debe completar un formulario de CLPI y un cuestionario. El Formulario de CLPI sirve para asegurarse de que la comunidad tiene pleno conocimiento de todas las implicaciones del registro. Entre otras cosas, en el cuestionario se consulta sobre la ubicación y las características medioambientales del territorio de vida, cómo la comunidad lo utiliza, cómo es gobernado y gestionado, qué tipos de derechos tiene la comunidad sobre el territorio de vida, las amenazas que enfrenta y su historia. El Equipo Local y el facilitador pueden ayudar a las comunidades a recopilar esta documentación.

Antes de que un territorio de vida se incluya en el Registro o en la WDPA, el Consorcio TICCA le solicita a la UNEP-WCMC que se asegure de que pase por un proceso de apoyo y revisión por pares, que certifique que se trata de un verdadero TICCA y que garantice que se han seguido los procedimientos adecuados para el registro (como el CLPI) y se han cumplido las normas apropiadas.

Los procesos de apoyo y revisión por pares deben ser desarrollados y dirigidos en cada país por una red de buena fe de Pueblos Indígenas y comunidades locales guardianes de los TICCA. Dada la sensibilidad de las tareas a realizar, se debe reconocer a la red como legítima por los Pueblos Indígenas o las comunidades locales del país. La red también se puede beneficiar al establecer afiliaciones con el Consorcio TICCA internacional y algunas formas de asociación con el PNUD y el PPD GEF, si es que existe alguna oficina en el país. Las redes TICCA deben escoger libremente un conjunto de valores y criterios que cumplirán (por ejemplo, imparcialidad y transparencia) y acordar un proceso apropiado para el apoyo y revisión por pares de los TICCA en su país. Hasta el momento, solo algunas redes nacionales TICC (como España e Irán) han deliberado sobre estos criterios y procesos, pero es probable que más lo hagan como parte de la Iniciativa Mundial de Apoyo a los TICCA. 

También existen Registros TICCA a nivel nacional (como en Filipinas e Irán), pero son menos conocidos o están menos desarrollados que los internacionales. Así como ocurre con el reconocimiento y apoyo internacionales en general, la oportunidad de registrar los TICCA en otros países estuvo disponible incluso antes de que muchos de ellos reconocieran la existencia de los TICCA en sus territorios.

¿Las comunidades guardianas deberían registrar sus territorios de vida a nivel internacional? Esta decisión se debería tomar según cada caso individual; las preguntas específicas y pertinentes se pueden explorar mediante un debate de base específico.

La red TICCA probablemente identificará diversas necesidades de reconocimiento y apoyo para sus territorios de vida, pero se debe tener en cuenta que la integridad interna y la fuerza de las comunidades guardianas es la condición más fundamental para la existencia y prosperidad de los territorios de vida y nunca debe ser perjudicada por el apoyo externo. En este aspecto, el apoyo financiero es particularmente peligroso, ya que puede convertirse en una carga para la comunidad y en un origen de conflictos y corrupción. Sin embargo, diversos tipos de iniciativas de reconocimiento y apoyo han demostrado ser de gran ayuda.

Recursos y herramientas para incidir por un reconocimiento y apoyo apropiados – nacional e internacional

Métodos/Enfoques:

  • Crear grupos de aprendizaje – entre ello, para compartir información y buscar puntos de entrada para cambiar las estructuras de poder en la gobernanza de los recursos naturales. Aunque no es específico de los territorios de vida gobernados por los pueblos indígenas y las comunidades locales, la experiencia con las Redes de Aprendizaje de Gobernanza Forestal puede aportar algunas ideas e inspiración (ver Mayers et al. 2013:57, Mayers et al. 2009).

Sitios web y organizaciones

Publicaciones:


[1] Dudley, 2008

[1] Kothari et al., 2013

[2] Borrini-Feyerabend et al., 2010

[3] Véase Morel, 2010 y Kashwan, 2013, citado por Jonas, 2016.

[4] Knox, 2017

[5] Tauli-Corpuz, 2016

[6] Véase las numerosas Resoluciones de la UICN para el reconocimiento y apoyo apropiados de los TICCA, entre ello, dentro de las áreas protegidas y para el reconocimiento del papel fundamental de la gobernanza en la conservación; las numerosas Decisiones del CDB que tratan de los TICCA; y las publicaciones resumidas disponibles, como Kothari y Newmann, 2014 y Jonas, 2016. 

[7] Véase FAO Directrices voluntarias sobre la gobernanza responsable de la tenencia.

[8] Kothari y Neumann, 2014

[9] Borrini-Feyerabend et al., 2010

[10] Ejemplos disponibles aquí

[11] Borrini-Feyerabend et al., 2013

[12] Para más información sobre los TICCA superpuestos por áreas protegidas estatales, véase Stevens et al., 2016

[13] Borrini-Feyerabend et al., 2010